Ministerio integral Familiar
Hermanos y hermanas en Cristo, hemos explorado el verdadero significado de la Navidad, una época que va más allá de las luces y los regalos. Hemos visto cómo el mundo ha comercializado esta festividad, alejándonos de su esencia: el nacimiento de nuestro Salvador, Jesucristo. Recordemos siempre que la Navidad es un tiempo de reflexión, gratitud y amor, no solo un evento comercial. Nuestro desafío es vivir la Navidad en nuestro diario vivir, mostrando el amor de Cristo a través de nuestras acciones y palabras. Como dice Colosenses 3:17, “Y todo lo que hagáis, de palabra o de obra, hacedlo todo en el nombre del Señor Jesús, dando gracias a Dios Padre por medio de él“. Esto significa llevar el espíritu navideño en nuestros corazones durante todo el año, siendo ejemplos vivos del amor y la gracia de Dios. En esta Navidad, los animo a mirar más allá de las luces y los adornos. Encontremos maneras de compartir el verdadero regalo de esta temporada: el amor incondicional de Dios. Demostremos ese amor en nuestras familias, nuestras comunidades y más allá. Que nuestra celebración de la Navidad refleje nuestra fe y nuestro compromiso con Jesucristo. Que Dios nos bendiga a todos en esta temporada navideña y nos ayude a recordar y vivir el verdadero significado de la Navidad. Amén.